La encíclica del Papa: Propone un nuevo modelo de desarrollo

ENCÍCLICA LAUDATO SI PAPA FRANCISCO –

El riesgo es que ahora se haga una caricatura del Papa Francisco, definiéndolo como "verde", por su atención a los temas delecología, o "rojo", por su sentido llamado a favor de los más vulnerables. Nada podría estar más equivocado. la encíclica Luadato sí, que recuerda el cántico sobre la belleza de la Creación de San Francisco, Es un documento extraordinario que reúne teología, filosofía, ciencia, catequesis, con una pastoral de rara eficacia y fuerza..

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ENCÍCLICA SOBRE EL MEDIO AMBIENTE LAUDATO SI –

A los cristianos, pero no sólo a ellos, Francisco Propone una opción radical, una «revolución cultural» inspirada en el paradigma de una «ecología integral».Una ecología que no se limita, como suele ocurrir en muchos movimientos verdes, a una defensa a ultranza y a veces paranoica del medio ambiente, sino que también afecta a la economía y la sociedad. De hecho, la mano del hombre que no protege el don divino de la creación es la misma que ha acrecentado los desequilibrios mundiales con una globalización injusta y ha humillado a los pueblos, favoreciendo en cambio la dominación de las grandes potencias financieras que controlan la política y socavan su primacía.

LOS MANDAMIENTOS VERDES DEL PAPA FRANCISCO –

Papa Bergoglio sacude nuestras conciencias con una propuesta que No viene del sombrero mágico, sino Se basa en la continuidad con los grandes textos sociales de Juan XXIII y Pablo VI y, en términos de diálogo interreligioso, con la posición del Patriarca Bartolomé. Quien dijo: «El crimen contra la naturaleza es un pecado contra Dios». Nos encontramos, pues, en el contexto de un ecumenismo pleno, una teología universal que abre los ojos del hombre a la naturaleza y al prójimo, a los diferentes, a los más débiles.

CONVERSIÓN ECOLÓGICA Y NUEVA ECONOMÍA CIRCULAR –

«No somos Dios», advierte el Papa, recordándonos nuestras propias limitaciones, como protección contra los delirios de omnipotencia que a menudo manifestamos a través del uso compulsivo de la tecnología: una gran oportunidad y, al mismo tiempo, un gran riesgo. Porque cuando los seres humanos se rinden a las máquinas, a la evolución de la tecnología, de la televisión a los celulares, de las computadoras a los teléfonos inteligentes, renuncian a su libertad. Se convierten en esclavos.

La degradación ambiental se combina, en el razonamiento del Papa Francisco, con la cultura del descarte, del doble descarte de las cosas y del hombre.. Es decir, desperdicio. Un verdadero pecado mortal, con el que nos relacionamos tanto con las cosas (en la encíclica se recuerda que el desperdicio de agua es fuente de guerras, y el desperdicio de alimentos es causa de hambre y pobreza), como en el caso de los hombres, excluyéndolos del privilegio del bienestar mediante nuestra indiferencia. También aquí, la elección de Bergoglio es clara y radical: una conversión ecológica que afecta los estilos de vida, el consumo y la forma de abordar cotidianamente los pequeños gestos de gran valor. Bergoglio habla de un nuevo consumo sostenible y responsable, la base de la filosofía de este sitio; llama a comportamientos inspirados en la sobriedad, lo cual no significa que todos nos hagamos franciscanos; valora y apuesta por la nueva economía circular en contraposición al viejo principio de usar y tirarEs un Papa que habla al corazón, al alma y a la mente. Y en un mundo aturdido por la incertidumbre, nos ofrece mucho más que un manifiesto verde: nos ofrece el camino hacia un nuevo modelo de desarrollo.

POR APROFONDIRE: El Papa contra la cultura del descarte