Cómo proteger a las personas mayores del calor

No los deje solos: la compañía es fundamental para combatir las altas temperaturas. Deben beber mucho líquido, vestir ropa ligera y evitar la sudoración.

verano caluroso para ancianos 2
El calor, sobre todo cuando es muy intenso, es Especialmente peligroso para las personas mayores. Las altas temperaturas las exponen a mayores riesgos.A medida que envejecemos, nuestros cuerpos pierden su capacidad de sudar eficazmente y nuestra capacidad natural de termorregulación disminuye, lo que nos dificulta adaptarnos a los cambios climáticos. En muchas personas mayores la sensación de sed disminuye, Esto facilita la deshidratación, y la movilidad reducida puede dificultar la búsqueda de lugares frescos y con sombra. Todas estas son buenas razones para proteger a las personas mayores con especial cuidado y atención cuando hace mucho calor.
El consejo práctico fundamental para evitar que la caldo Podría comprometer la vida de anciano Durante los meses de verano son los siguientes:
  • Hazles beber mucho, incluso unos dos litros al día
  • Comidas divididas: pequeño e a menudo. durante el día e No concentrado en los horarios habituales de desayuno y almuerzo e cena
  • En las comidas, planifique poca sal e bajo en grasas
  • Elige ropa de colores claros, con tejidos naturales y cómodos e fresco
  • Úselo responsablemente e consciente del aire acondicionado, evitar cambios bruscos de temperatura e que los dispositivos apuntan a los cuerpos de las personas anciano
  • Evite a los fanáticos, especialmente si está dirigido a personas mayores
  • Recuerde que el anciano Deben sudar lo menos posible Incluso cuando hace mucho calor caldo
  • No subestimes las señales de impaciencia e Controle la cantidad de oxígeno en su sangre con un oxímetro de pulso
  • Una temperatura ideal Se considera que la temperatura ronda los 26 grados, con un nivel de humedad del 80 por ciento.
  • Ventile la casa durante las horas nocturnas ed evitar que entre el sol durante el día
  • Intente asegurarse de que la persona mayor lo haga de todos modos. un mínimo de actividad física

Cómo refrescar a los mayores

Para refrescar a las personas mayores, siga estas sencillas instrucciones:
  • Hazles beber, incluso si no tienen sed y tienden a rechazar el agua.
  • Como alternativa al agua, también ofrecemos bebidas naturales, como agua de cebada y leche de almendras.
  • Tranquilícelos si tienen tendencia a tener presión arterial alta midiendo su presión arterial diariamente, especialmente si tienen más de 75 años. Tanto acostados como de pie.
  • Si salen, asegúrese de que siempre lleven un sombrero y unas gafas de sol.
  • Tenga siempre a mano el número de teléfono de un médico de familia o de un servicio de urgencias cercano a su domicilio.

Ropa apropiada

Las personas mayores, más que nadie, deben afrontar el calor siempre con ropa adecuada.
  • Usar ropa ligera, ligero y fabricado con fibras naturales (algodón o lino).
  • Prefiera ropa con mangas largas ligeras y pantalones largos (es mejor evitar los pantalones cortos, incluso para ir a la playa).
  • Traer un sombrero de ala ancha y gafas de sol si sales.
  • Use zapatos cómodos y transpirables.
  • Utilice protector solar de alta protección, especialmente en cara, brazos y manos.

Precauciones para las personas mayores en climas muy calurosos

Cuando hace mucho calor, las personas mayores deben tener especial cuidado con:
  • Evite el esfuerzo físico durante las horas de más calor. Y evite salir, si es posible, entre las 11:00 y las 17:00.
  • Caminar a paso rápido: tus pasos deben ser lentos y constantes.
  • Deténgase en la sombra tan pronto como se sienta particularmente cansado o con dificultad para respirar.
  • Mantenga su presión arterial bajo control, evitando que se produzcan demasiado bajo o demasiado alto
  • Intenta no estar nunca solo, incluso cuando tengas buena salud y seas autosuficiente.

¿Por qué las personas mayores son más susceptibles al calor?

Cuando hace mucho calor, todos nos volvemos más susceptibles y menos pacientes de lo habitual (suponiendo que seamos personas pacientes, claro está). En algunos casos, corremos el riesgo de perder la compostura y sentirnos bastante confundidos. El riesgo de experimentar este tipo de problemas en las personas mayores aumenta significativamente con temperaturas muy altas, ya que el calor interfiere negativamente en las funciones cognitivas. Además, el calor nocturno altera considerablemente el sueño de las personas mayores, volviéndolas más irritables y menos obedientes durante el día. Por último, las personas mayores, en el calor abrasador, pueden experimentar una sensación de frustración debido a la pérdida de autonomía y a la mayor dependencia de los demás. 

Lea también:

¿Quieres ver una selección de nuestras novedades?