Por qué debes decirle la verdad al médico

Ocho de cada diez pacientes mienten a su médico. Vergüenza, ansiedad, preocupación. Pero también es culpa del Dr. Google.

Dile la verdad al doctor

¿POR QUÉ DECIRLE LA VERDAD AL DOCTOR?

El médico en la era de Internet: de los tratamientos caseros a los...hipocondría de Google. Sin mencionar a aquellos que, consciente o inconscientemente, vergüenza, le miente a su médico.
Hacerlo corre el riesgo de comprometer la validez del proceso terapéutico, socavar la relación con el médico y poner en riesgo nuestra salud al impedir un diagnóstico correcto. Además, ¿Por qué mentir cuando la honestidad es el primer paso hacia la curación?

Un estudio realizado por investigadores de Salt Lake City, con una muestra de 5 mil participantes,  ha demostrado que aproximadamente el80% de los pacientes No le dicen la verdad a su médico. Según el equipo de investigación, los temas sobre los que más se miente son los relacionados con la nutrición y la actividad física.
A menudo, entonces, uno no logra comunicar su decepción al médico que lo atiende. farmaci Nos han recetado algún medicamento, o tenemos dudas sobre sus contraindicaciones (y luego dejamos de tomarlo), o no entendemos las indicaciones terapéuticas ni la dosis. Además, a menudo fingimos tranquilidad cuando, en realidad, nos han alertado las búsquedas de síntomas en buscadores, que a veces, en lugar de ofrecer respuestas, generan dudas y mayor confusión.

El identikit del paciente mentiroso, según revelan las conclusiones del estudio, es mayoritariamente joven, culto, profesional y con baja autoestima. Pero cada uno de nosotros corre el riesgo de convertirse en un colegial que miente a su maestro.

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¿POR QUÉ NO MENTIRLE AL DOCTOR?

Sin embargo, los médicos parecen estar entrenados en el juego de Para desenmascarar las mentiras del pacienteTanto es así que confiesan tener una forma casi infalible de hacer que las mentiras de los pacientes sean lo más inofensivas posible. Y es la llamada regla de 3: todo lo que decimos que bebemos o comemos, los médicos lo multiplican por tres. Admitimos que bebemos. una copa de vino con la cena?Se convertirá automáticamente en 3 vasos.
Una forma inteligente de intentar mitigar los riesgos del juego del gato y el ratón que se desarrolla entre médicos y pacientes. Sin embargo, esto es un... juego muy peligrosoY es una pérdida de tiempo y salud que debería evitarse por completo. Por al menos cinco razones.

DIAGNÓSTICO EQUIVOCADO

Si no es transparente sobre sus comportamientos poco saludables, su dieta o hábitos que podrían perjudicar su salud, y si evita responder honestamente a las preguntas sobre su historial médico, puede confundir a su médico y dificultar el diagnóstico y el tratamiento. O, de lo contrario, corre el riesgo de confundirlo por completo.

RELACIÓN OPACA CON EL TERAPEUTA

El terapeuta está obligado por el secreto profesional y éticamente orientado a no adoptar una actitud juiciosa, por lo que si la relación con el profesional no se caracteriza por una cierta transparencia y la ausencia de pudor o vergüenza, falta el contexto necesario para una atención óptima.

Dile la verdad al doctor

RIESGOS PARA LA SALUD

Las omisiones son un “tipo” de Mentiras Muy extendido, y lamentablemente también peligroso. Hace unos años, el caso de un niño con cáncer fue noticia. Su padre le administró en secreto otros brebajes que, combinados con quimioterapia, llevaron al joven paciente al borde de la cirrosis hepática.

TERAPIA INEFICAZ

Por vergüenza y miedo a ser juzgados, los pacientes suelen fingir calma. Fingen haber seguido y comprendido todo al pie de la letra, y por lo tanto es imposible comprender realmente si la terapia ha tenido algún efecto positivo.

EFECTO BOOMERANG

Si los pacientes no son completamente honestos, incluso el médico tratante puede sentirse con derecho a recibir explicaciones poco claras sobre el tratamiento o el diagnóstico. De hecho, un estudio reciente realizado en EE. UU. demostró que incluso quienes nos tratan pueden tener a menudo la nariz de Pinocho. El estudio, realizado con una muestra de más de 1800 especialistas, reveló que más de la mitad había dado a sus pacientes un pronóstico más optimista del que realmente era; aproximadamente el 20 % admitió haber ocultado información al paciente sobre su diagnóstico erróneo por temor a acciones legales. Y uno de cada diez afirmó haberle mentido al menos una vez a su profesional de la salud en el transcurso de un año.

En conclusión, en resumen, la sinceridad es siempre la mejor opción.

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